Un teatro de cine

No hay telón. Hoy entregas la entrada al hombre de la puerta del Teatro Principal de Alicante y apareces en la sala, llena de gente buscando su butaca y, en escenario, los camerinos. Y los actores. No hay voz que avisa de que "en cinco minutos la función va a comenzar", directamente se apagan las luces y se ilumina el pequeño cuadrilátero móvil en el que se representa la acción. Una plataforma de unos tres metros cuadrados, simulando ser el salón de la casa del Crimen Perfecto de Hitchcock, 1954.

Para quien no conozca la historia (basada en la novela de Frederick Knott), trata sobre un ex tenista de éxito que quiere asesinar a su esposa para hacerse con la herencia que ella le deja. Para ello recurre a la ayuda de un conocido, Swan Lesgate, con el que tramará el crimen perfecto...

La obra cuenta con dos actos, una trama que engancha sola y un reparto de calidad actual: Elena Furiase como Margot, Jorge Sanz como Tony Wendice y Pablo Puyol como Max Halliday. Destacando, entre ellos a Sanz y a sus tablas (y algún pequeño lapsus), tres papeles desempeñados correctamente en una escena de los años cincuenta. Acentuamos el papel de Antonio Abella -foto- como Inspector Hubbard, quien rellena el ritmo y pone el toque histriónico que termina de desencadenar la historia.

Un teatro de cine, es lo que ha conseguido su director, Víctor Conde: "Me pareció que la mejor idea era crear la escena como si fuera el propio rodaje". Este concepto supone una innovación en las tablas, que no siempre son estáticas. Un planteamiento lleno de dinamismo y soltura, sin duda de lo más destacable.

El juego estaba en que la plataforma giraba de tal manera que hacía entender al espectador que se encontraba viendo una transición de planos. Cuando los actores bajaban de la plataforma, aparecían dos "ayudantes de producción" retocando detalles a los actores y a la escena, y cambiando ellos mismos los decorados. Algo sorprendente para el público.

Un teatro espectante a la espera de la resolución de un crimen por tercera vez. Su tercera función ha permitido al director sentarse "en una butaca, como cualquier espectador". Alicante ha recibido el estreno de esta obra de carácter nacional con una gran acogida, llenando prácticamente los tres días. Crimen Perfecto empieza aquí su andadura por España para desembocar en Madrid en septiembre.

Víctor Conde ha participado en la dirección y colaboración de importantes obras del panorama teatral, como Chicago, Pegados, La ratonera, que vino a estas tablas hace escasos quince días con triunfo absoluto, o la exitosamente actual Los Miserables. Desde aquí un abrazo fuerte a todo el equipo, en especial a este director que nos ha transportado a medio siglo pasado y a una historia intrigante y muy entretenida. Mucho ánimo y suerte, que la escena siga tan perfecta como el crimen.

Con vosotros el HONOR de presentaros a Víctor Conde, quien manda un saludo a nuestro blog